Tesla evita demandas colectivas y se enfrenta a una ola de demandas individuales

Tesla ha evitado por poco una importante demanda colectiva que alega discriminación racial en su fábrica de Fremont, California, pero la compañía ahora enfrenta una oleada de cientos de demandas individuales. Un juez de California dictaminó esta semana que el caso, presentado originalmente por el ex trabajador Marcus Vaughn, no puede proceder como una demanda colectiva debido a la falta de testimonio voluntario de demandantes seleccionados al azar. A pesar de este revés para los demandantes, la batalla legal está lejos de terminar, con más de 500 demandas individuales ya presentadas y potencialmente 900 más en el horizonte.

Demanda colectiva desestimada por falta de testimonio

La demanda, que alegaba acoso racial generalizado, incluidos insultos y lazos en los lugares de trabajo, fue certificada inicialmente como una demanda colectiva en 2024. Sin embargo, el juez Peter Borkon desestimó la certificación colectiva, afirmando que demasiados trabajadores seleccionados al azar no estaban dispuestos a testificar en el juicio. Esta decisión impide efectivamente que los demandantes sigan el caso como una acción legal única y unificada.

Por qué es importante el testimonio

El fallo del juez subraya un aspecto crítico de las demandas colectivas: la necesidad de testimonio representativo. Las demandas colectivas se basan en el supuesto de que las experiencias de un grupo más pequeño de demandantes reflejan con precisión las experiencias de la clase más amplia que representan. Sin un testimonio suficiente y voluntario, el tribunal no puede aplicar de manera confiable el resultado del caso a todos los posibles demandantes.

Se espera que aumenten las demandas individuales

A pesar del revés, el equipo legal de los demandantes tiene la intención de presentar cientos de demandas individuales contra Tesla. El abogado codirector de los demandantes, Bryan J. Schwartz, confirmó que ya se han presentado más de 500 demandas, con la posibilidad de superar las 900 reclamaciones en total. Este cambio hacia el litigio individual refleja una respuesta pragmática a la decisión del juez, permitiendo a los demandantes presentar sus quejas caso por caso.

La barrera económica al testimonio

Un factor clave que contribuye a la falta de testimonios voluntariosos son las dificultades económicas que enfrentan muchos trabajadores de Tesla. Según uno de los abogados de los demandantes, Lawrence Organ, muchos de los nombrados en la demanda colectiva son empleados de bajos ingresos que no pueden permitirse el lujo de faltar al trabajo y participar en el juicio. Esto pone de relieve el desequilibrio de poder entre una gran corporación como Tesla y sus trabajadores por horas, quienes pueden ser reacios a arriesgar sus puestos de trabajo testificando contra la empresa.

Implicaciones para Tesla

La desestimación de la demanda colectiva no exime a Tesla de responsabilidad. La empresa todavía enfrenta una serie de demandas individuales potencialmente costosas y que requieren mucho tiempo, cada una de las cuales requiere procedimientos legales separados. El aumento de las reclamaciones podría sobrecargar los recursos legales de Tesla y dañar aún más su reputación. El litigio en curso subraya los persistentes desafíos que enfrenta Tesla al abordar las acusaciones de discriminación racial en sus fábricas.

El paso de una demanda colectiva a demandas individuales probablemente prolongará la batalla legal y aumentará el costo general para ambas partes. Tesla ha evitado por poco una demanda colectiva importante, pero la empresa ahora se enfrenta a una ola de reclamaciones individuales que podrían resultar igualmente perjudiciales a largo plazo.